El bizcochuelo es una preparación sin leche ni manteca, por eso queda mas suave y esponjoso que una torta. La receta que sigue es la clásica que recuerdo de mi niñez.
12 huevos.
400 gramos de azúcar.
400 gramos de harina leudante.
Esencia de vainilla o ralladura de limón/naranja.
Frutillas y kiwi
Helado de crema o vainilla.
Colocar los 12 huevos (a temperatura ambiente) en un recipiente y batir vigorosamente con batidor de alambre o batidora eléctrica junto con los 400 gramos de azúcar y una cucharada de esencia de vainilla o ralladura de limón/naranja. Está listo cuando pasamos el dedo por la preparación y queda un surco que no desaparece. Agregar la harina de a poco, colándola con un cernidor y mezclándola suavemente. Airear la masa levantando suavemente la espátula con movimientos circulares. Colocar en molde alto lubricado y enharinado y llevar a horno moderado aproximadamente 50 minutos. No abrir la puerta del horno antes de por lo menos 30 minutos para que no se aplaste. Desmoldar con cuidado sobre rejilla de alambre.
Preparar un almíbar liviano con medio kilo de azúcar y 100 cc de agua. Cuando el bizcochuelo esté frío entibiar el almíbar y rociar con él al bizcochuelo. Servir con una bocha de helado de crema o vainilla y decorar con frutillas y kiwis en rodajas.
Si elige este postre para la cena de Navidad, lo puede preparar en pequeños moldes individuales, para servir un mini bizcochuelo por comensal y poner todos los minibizcochuelos en un gran plato central.
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Para leer sobre los secretos del almíbar va un link debajo
El azúcar y los almíbares
Que delicioso!!, ya se me antojo uno. jejeje.
ResponderBorrarMe gusta tu blog, lo seguiré visitando.